Hoy, 20 de noviembre, Día Mundial de la Infancia

• Actualmente más de 32o menores de 12 años son atendidos con programas específicos de alimentación por el Banco de Alimentos de Sevilla.
• Según el último informe elaborado por Cáritas, la pobreza severa afecta en España a más de 3 millones de personas (8,1% de la población).
• La pobreza es peligrosa precisamente porque sus efectos pueden transmitirse generación en generación.

Cada 20 de noviembre se celebra el Día Mundial de la Infancia para reivindicar los derechos de los niños y niñas, así como para sensibilizar a la población sobre su bienestar y la importancia del desarrollo infantil. Esta fecha en el calendario también sirve para recordar que los más pequeños son el colectivo más vulnerable y, por tanto, es vital prestar especial atención a su protección, salud y educación.

Un día como hoy hace justo 64 años, Naciones Unidas (ONU) aprobó la Declaración de los Derechos del Niño. Un documento que consta de 10 Principios orientados a garantizar el desarrollo de una infancia feliz y segura para este colectivo que requiere de unos cuidados y necesidades adicionales. Especialmente si se tiene en cuenta que son los niños quienes más sufren las consecuencias derivadas de guerras y otros problemas como la escasez de recursos.

Y, precisamente, una de las consecuencias del aumento de la pobreza es la drástica reducción de las oportunidades para los menores de edad. De acuerdo con el Informe sobre la Situación de la Infancia en España en 2022, la pobreza no sólo implica la carencia de los recursos, sino que también se evalúa teniendo en cuenta otros parámetros. “Se trata de una cuestión multidimensional, vinculada a la exclusión social y a la falta de acceso a los servicios, incluidos el cuidado de los niños, una educación de alta calidad y una vivienda adecuada. La pobreza también incluye, por ejemplo, la imposibilidad de participar en actividades sociales y culturales con sus padres”. Y el principal peligro de todo ello es que los efectos de la pobreza, que también se manifiestan en el ámbito energético o digital, pueden perdurar y transmitirse de generación en generación.

La manifestación más evidente de este complicado  acceso a los recursos es la dificultad que presentan muchas familias para poder proporcionar a sus hijos alimentos. Y de acuerdo con el último informe elaborado por Cáritas, la pobreza severa afecta en España a más de 3 millones de personas (8,1% de la población). Esto se relaciona con el cuarto Principio de la carta redactada por la ONU: los menores tienen “derecho a crecer y desarrollarse en buena salud”. La declaración también pone de manifiesto que los más pequeños tienen derecho a disfrutar de una alimentación que asegure su bienestar físico y mental.

En línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, desde el Banco de Alimentos de Sevilla trabajamos para garantizar el Fin de la pobreza, Hambre Cero y garantizar la Salud y Bienestar en la provincia a través de los diferentes programas de intervención directa. Y de cara a conseguir nuestra meta, actualmente más de 32o menores de 12 años son atendidos con programas específicos de alimentación por el Banco de Alimentos de Sevilla. Cifras que evidencian nuestro compromiso con la sociedad y con un colectivo tan importante como son los menores, a la que queremos seguir ayudando a través de grandes campañas de recogida de alimentos como la que tendrá lugar este fin de semana.

Y como decía Hipócrates, “¡que tu medicina sea tu alimento y que tu alimento sea tu medicina!”